En rueda de prensa realizada este miércoles, el mandatario explicó que las nuevas medidas se suman a la eliminación de los impuestos provinciales. También recordó que se sostienen y se adecuaron 14 programas de subsidios que ya se venían implementando y que se está trabajando en implementar otros nuevos.
Frigerio señaló que el conjunto de nuevas medidas se vincula al ítem que puede modificar el gobierno provincial, el VAD, siendo la primera medida congelar el precio del mismo hasta el 31 de diciembre de este año. Se trata del costo generado por las tareas de operación, mantenimiento e inversiones, el cual se traslada al usuario final de acuerdo a la legislación vigente.
A su vez, se aplicará un 25 por ciento de descuento en este ítem a usuarios residenciales de escasos recursos para los primeros 700 kWh bimestrales. La medida beneficia al 50 por ciento de los hogares entrerrianos y al 100 por ciento de las familias con ingresos menores a 900.000 pesos mensuales.
Una medida similar se adopta con comerciantes, pymes, profesionales y prestadores de servicios, subsidiando el 50 por ciento del VAD para los primeros 700 kwh bimestrales, lo que impacta en el 60 por ciento del total de usuarios de este sector.
En la rueda de prensa estuvieron presentes también la secretaria de Energía, Noelia Zapata; el presidente de Enersa, Ignacio Bergallo; y el titular del Ente Provincial Regulador de Energía (EPRE), Juan Domingo Zacarías.
SUBSIDIOS PROVINCIALES
Entre los 14 programas de bonificación de tarifas que mantiene la provincia, la mayor inversión está destinada a las familias de bajos recursos, incluyendo bonificaciones a jubilados o pensionados y grupos familiares numerosos. También se invierte en la infraestructura para incluir a usuarios sin servicio o que se encuentren en situaciones irregulares de conexión eléctrica y el sostenimiento de medidores comunitarios.
Le siguen en materia de inversión los programas destinados a acompañar el sector productivo. Se bonifica en un 4 por ciento a los usuarios identificados como de actividades productivas y entre un 4 y un 15 por ciento a las industrias, con bonificación especial (un 5 por ciento más) para quienes utilicen energías renovables y reintegros de hasta un 50 por ciento a quienes realicen obras de infraestructuras vinculadas a servicio eléctrico y de gas. Beneficios similares a los del sector industrial están habilitados para las actividades vinculadas a la economía del conocimiento.
También están vigentes actualmente tarifas bonificadas para personas de bajos recursos que requieran la utilización de equipos por problemas de salud y la cobertura del 100 por ciento de la tarifa para electrodependientes. Por otro lado, se está trabajando en la reimplementación de un subsidio a los efectores de salud, que estuvo vigente en época de pandemia.
Se mantienen a su vez, los subsidios a la tarifa para instituciones deportivas, que se incrementaron de 27 y 35, a 35 y 45 por ciento. Asimismo, se bonifica entre un 30 y 35 por ciento la tarifa de centros culturales, salas culturales y teatros independientes; y un 27 por ciento a instituciones educativas de gestión privada. Además, los destacamentos de Bomberos Voluntarios cuentan con un subsidio del 50 por ciento y las asociaciones sin fines de lucro que brindan acompañamiento a personas en situación de vulnerabilidad, víctimas de violencia o que transiten la rehabilitación de adicciones, entre un 35 y 45 por ciento.